El nuevo presidente de la Diputación de Burgos, Borja Suárez, visitó ayer la Casa de la Iglesia y saludó al arzobispo, don Mario Iceta Gavicagogeascoa, en la ronda de contactos que está manteniendo con responsables de instituciones y organismos tras su elección al frente de la institución provincial el pasado 11 de julio.
La reunión sirvió como una primera toma de contacto y en ella dialogaron de algunas cuestiones que afectan a ambas instituciones, como las relacionadas con el patrimonio y la proyección cultural del mismo. En el diálogo, arzobispo y presidente provincial se mostraron abiertos a abrir «nuevos abanicos» y formas de trabajo conjunto. También hablaron de los problemas que atañen a la provincia y la necesidad de prestarles especial atención, como la despoblación, el desempleo y la economía en la provincia. Un encuentro institucional que ambas partes califican de «provechoso», dentro de la «absolutamente estrecha colaboración» que existe entre Arzobispado y Diputación.