El edificio del Seminario de Vitoria fue ayer un ir y venir de arzobispos, obispos y vicarios generales. A primera hora de la mañana, el nuevo arzobispo de Pamplona y Tudela, Mons. Florencio Roselló Avellanas, presidía la reunión de su provincia eclesiástica, integrada por su archidiócesis y las diócesis de San Sebastián, Calahorra y La Calzada-Logroño y Jaca. Poco después llegaba la delegación de la provincia eclesiástica de Burgos, integrada por esta archidiócesis y las diócesis de Vitoria, Bilbao, Osma-Soria y Palencia que también se reunió en un encuentro presidido por el arzobispo de Burgos, Mons. Mario Iceta Gavicagogeascoa. En ambas reuniones se abordaron temas de pastoral juvenil, aranceles, oficinas de protección de menores y algunos de los asuntos que serán tratados en la próxima Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE), que se celebrará del 4 al 8 de marzo en Madrid.
Posteriormente, se celebró una asamblea conjunta de ambas provincias. En esta reunión, de más de dos horas de duración, los arzobispos, obispos y vicarios generales compartieron impresiones y perfilaron líneas de trabajo que permitirán avanzar de manera conjunta hacia una fructífera colaboración interdiocesana en asuntos de vital trascendencia como son la promoción vocacional y la formación, siempre en armonía con las propuestas que el papa Francisco transmitió a todos los obispos españoles el pasado mes de noviembre en Roma. Se trata del primer encuentro de esta clase que se ha realizado en Vitoria en los últimos 30 años.