Un nutrido grupo de laicos del arciprestazgo de Amaya ha organizado, durante los sábados del mes de mayo, dedicado a la Virgen María, una serie de rosarios en pueblos de la provincia. El grupo ha rezado la oración mariana mientras caminaba desde la ermita del pueblo en cuestión.
Es una forma de responder a la propuesta 45 del Documento Final de la Asamblea Diocesana, que dice: «Dar a conocer y seguir apoyando las realidades de oración en grupo y fomentar nuevas propuestas, con diversas opciones, para avivar nuestra fe». Y en su número 160, la actitud: «Sensibilizarnos todos los creyentes en una apertura a la movilidad y a la diocesaneidad, superando los personalismos individualistas y los parroquialismos sin presente ni futuro».
Esto es lo que se ha vivido en el mes de mayo, por tercer año consecutivo, entre los pueblos de Hontanas, Castellanos de Castro, Castrillo de Murcia, Yudego y Villandiego. Cada sábado del mes de María, laicos de los cinco pueblos se reúnen para orar con el rosario a la Virgen, partiendo de cada una de sus ermitas. Hay tiempo para el encuentro, los saludos, para compartir la vida y la fe. Abiertos a desplazarse a otros pueblos vecinos, dispuestos a acoger a los que les visitan y sobre todo, a testimoniar una vida enraizada en la fe. Y este año por iniciativa de los laicos de los distintos pueblos, asumiendo ellos la organización. Una acción que da vida a las comunidades rurales.