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Al igual que san José recibió en sueños la tarea de acoger al niño y ponerle por nombre Jesús, «Dios también nos confía la Iglesia para que cuidemos de ella». «Él pone en nuestras manos lo más precioso, por quien se he encarnado y por quien ha dado su vida, su cuerpo y su sangre. Esa es la tarea a la que estamos convocados. Los pobres no son nuestros; las parroquias no son nuestras; las familias no son nuestras, son el campo de Dios que nosotros hemos de cuidar». Con estas palabras, el arzobispo ha recordado a los miembros de la curia y a cuantos tienen responsabilidades pastorales en la archidiócesis que su misión es «ayudar a los fieles a ser santos, a cumplir su vocación y ejercer la caridad». Lo ha hecho durante la celebración de la Palabra con la que felicita cada año a la archidiócesis, y que ha tenido lugar esta mañana en la capilla de la Facultad de Teología.

Para monseñor Mario Iceta, «la curia no está al servicio del obispo, sino al revés». Por eso, su deseo es «pasar de puntillas» y dejar que cada uno «haga lo que tiene que hacer, pues cada uno es responsable ante Dios para llevar adelante la tarea de la evangelización». Por ello, hoy ha querido «agradecer y felicitar por su entrega» al personal de la curia y a cuantos burgaleses se han hecho presentes en el acto, ya que «Dios os ha elegido para una tarea».

A las puertas de la Nochebuena, el arzobispo también ha pedido «acoger al Hijo de Dios» en medio de un mundo que, ha dicho, no lo espera. «Él ha acogido nuestro barro, no ha hecho asco a nuestra humanidad. Dios toca y abraza nuestro barro y quiere ser acogido».

Balance y proyección de futuro

Por su parte, el vicario general, Carlos Izquierdo, ha trasladado la felicitación de toda la archidiócesis al arzobispo. Ha hecho balance de las tareas realizadas en el último año, entre las que ha destacado la constitución de Ars Burgensis, la consolidación de la fundación Manjón Palencia o las sucesivas acciones de tono sinodal emprendidas. También ha incidido en las oportunidades pastorales y evangelizadoras que el jubileo ‘Peregrinos de Esperanza’ brindará a la archidiócesis durante 2025, y que se inaugurará de forma oficial en Burgos el próximo domingo 29 de diciembre.