La comunidad peruana ha celebrado este sábado en Burgos la fiesta del Señor de los Milagros, una de las devociones más extendidas del país andino. A pesar de la lluvia caída durante la tarde del 25 de octubre, el tiempo dio una tregua justo en el momento en que la imagen salió del templo parroquial de la Anunciación, permitiendo que pudiera recorrer en procesión las calles del entorno.
La imagen del Cristo, precedida por el humo de los sahumerios, fue portada con solemnidad por hermanos peruanos llegados tanto de Burgos como de otros lugares de España. Entre cantos y oraciones, los fieles acompañaron al Señor de los Milagros en un ambiente de profunda devoción y agradecimiento.
Antes de la procesión, el arzobispo de Burgos, Mons. Mario Iceta Gavicagogeascoa, presidió la celebración eucarística en honor al Señor de los Milagros, concelebrada por varios sacerdotes. En su homilía, invitó a todos a acudir al Señor con confianza y humildad, para repetir con fe la súplica cristiana: «Kyrie eleison, Señor, ten piedad». Dirigiéndose a los fieles peruanos, el arzobispo expresó unas palabras de especial cercanía: «Estáis en vuestra casa».
La celebración, marcada por la emoción y el sentido de comunidad, reunió a numerosas familias que quisieron agradecer los favores recibidos y renovar su fe. La asociación peruana Hijos del Sol fue la encargada de organizar esta fiesta, una tradición que une al pueblo peruano con la Iglesia que peregrina en Burgos y que ya se ha convertido en una cita habitual en el calendario de la ciudad.
La tarde concluyó en el claustro de la parroquia, donde los asistentes pudieron disfrutar de una danza típica y de un aperitivo amenizado con música, prolongando el ambiente festivo y fraterno que caracteriza cada año la celebración del Señor de los Milagros en Burgos.






