El departamento de Formación Sociopolítica de la archidiócesis de Burgos organizó esta semana su XVI Encuentro con Políticos, que en esta edición se centró en los desafíos que plantea el trabajo para la política. Los asistentes, entre los que hubo representantes de diversos partidos y pastorales, asociaciones y movimientos de la Iglesia, se congregaron en la residencia de los jesuitas de la calle Molinillo. En línea con la campaña diocesana por el trabajo digno, el encuentro buscaba responder a dos preguntas: la primera, acerca de las áreas o sectores en las que se producen vulneraciones laborales o precariedad, y la segunda, sobre las posibles soluciones. Antes, se expusieron algunas iniciativas relacionadas con el motivo de la campaña y las aportaciones de los grupos a los que se envió el cuestionario con ambas preguntas.
Entre los presentes, se destacó que la precariedad no afecta sólo a los asalariados, sino que también los autónomos pueden verse sometidos a condiciones difíciles, a las que se añade las responsabilidades que, en ocasiones, han contraído. También se mencionó que las condiciones laborales, y no sólo el salario, contribuyen al trabajo decente, con especial énfasis en el ambiente de trabajo. A la satisfacción laboral contribuye el trabajo entendido como vocación, donde la persona se realiza y donde se valoran su preparación y conocimientos, y no sólo como una fuente de ingresos. Los sectores más proclives a la vulneración de derechos, según los asistentes, son la hostelería, los cuidados o el comercio, aunque no de forma exclusiva.
Con respecto a lo que puede hacerse desde la política, que era la segunda cuestión, se incidió en la necesidad de reforzar la Inspección laboral y de apostar por modelos de formación duales, que den oportunidades a los jóvenes más vulnerables, pero también una motivación para romper con el ciclo de la exclusión. La situación de las personas que intentan incorporarse al mercado de trabajo tras finalizar sus estudios ocupó un momento destacado de la reflexión. Por último, varios de los presentes señalaron que el tejido empresarial de Burgos favorece una tasa de desempleo baja y buenos salarios aunque, por otra parte, también incide en el aumento de los precios. Ya en la conclusión, los representantes políticos agradecieron la posibilidad de disponer de espacios de intercambio de ideas que, en el caso del Encuentro con Políticos del departamento de Formación Sociopolítica, sigue en marcha después de una década y media.