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Los próximos días 28 y 29 de mayo tendrán lugar las XVI Jornadas de diálogo organizadas por el “Grupo de conocimiento y diálogo cristiano-musulmán”, que comenzó hace diecisiete años por iniciativa de la delegación diocesana de Pastoral de Migraciones, y en el que participan varios musulmanes y católicos. El lugar será el salón de Jesuitas en c/ Molinillo 3 desde las 19:30 horas.

La cuestión que se plantea en esta ocasión, «Dios, migrantes, ¿esperanza?», gira en torno al papel que juega la fe (cualquiera que sea, cristiana o musulmana), a la hora de tomar la decisión de emigrar, en el camino y cuando se llega al nuevo país de destino. Se enmarca en el lema que el papa Francisco propuso para la Jornada mundial del Emigrante y el Refugiado del pasado mes de septiembre: «Dios camina con su pueblo».

Como recordaba el papa, «muchos emigrantes experimentan a Dios como compañero de viaje, guía y ancla de salvación. Se encomiendan a Él antes de partir y a Él acuden en situaciones de necesidad. En Él buscan consuelo en los momentos de desesperación. Gracias a Él, hay buenos samaritanos en el camino. A Él, en la oración, confían sus esperanzas. Imaginemos cuántas biblias, evangelios, libros de oraciones y rosarios acompañan a los emigrantes en sus viajes a través de desiertos, ríos y mares, y de las fronteras de todos los continentes».

El miércoles 28 tendrá lugar la primera de las sesiones, en la que se realizará una conexión online con Montse Prats, religiosa del Sagrado Corazón de Jesús, española, co-coordinadora del proyecto migración KUMU, que trabaja en Oujda, ciudad de Marruecos cercana a la frontera con Argelia. Intervendrán además algunas personas musulmanas residentes en Burgos que compartirán su experiencia.

Y el jueves 29 habrá una charla en la que se contará con la presencia de Marie Lucia Monsheneke, católica, activista, co-fundadora y presidenta de Famek Elkartea, Asociación de Mujeres Kongovascas (Bilbao), quien desarrollará el tema de las jornadas desde su experiencia propia y acompañando a otras migrantes.

Estas jornadas de diálogo cristiano-musulmán están abiertas al público interesado, y especialmente a cuantos piensan que es necesario dialogar, convivir y trabajar juntos desde las diversas creencias religiosas.