En el Alfoz de Burgos son varios los pueblos que llevan el nombre árabe de «Modúbar». Los más avezados en la etimología apuntan que «Modúbar» es algo así como «retorno del agua». Sea como fuere, «san Cibrián» no tiene otra identidad que san Cipriano, obispo africano que murió en diciembre de 257.
El alcalde pedáneo de esta localidad, próxima a Burgos y dependiente de Ibeas de Juarros, Antonio Villaverde, ha decidido exprimir todo el potencial cultural de Modúbar con el encargo y publicación de pequeños estudios sobre historia y tradiciones de esta localidad. El libro presentado ayer consta de dos partes: una realizada por Ana Saiz Díez, quien analiza el inmueble como bien artístico, y una segunda parte, más breve, en la que José Matesanz estudia la recuperación del Monumento de la Semana Santa.
El acto —al que acudieron en representación de la archidiócesis Carlos Izquierdo, vicario general de la archidiócesis; Juan Álvarez Quevedo, delegado episcopal de Patrimonio; y Ezequiel Rodríguez, párroco de Modúbar— se desarrolló en la ermita de la Divina Providencia de la localidad con la presencia de más 50 personas. El alcalde mostró todo su entusiasmo por este tipo de trabajos. Anunció que para el 2024 aparecería un volumen sobre la escuela del pueblo.
Tras la presentación, ha actuado el coro parroquial de Ibeas de Juarros con una selección de villancicos de todo el mundo. La actividad investigadora seguirá esta semana con la presentación de las conclusiones de los diferentes estudios arqueológicos realizados en la zona.
Este encuentro tendrá lugar los días 14 y 15 de diciembre y será coordinado por Fabiola Monzón, arqueóloga; José Ángel Lecanda, de la Universidad de Deusto, e Iván García Izquierdo, de la Universidad de Burgos (UBU). Estas I Jornadas Históricas que organizan la Junta Vecinal de Modúbar de San Cibrián y el Ayuntamiento de Ibeas de Juarros, junto al Área de Historia Medieval de la UBU, serán inauguradas por la viceconsejera de Acción Cultural de la Junta de Castilla y León, Mar Sancho.