Este sábado, 1 de marzo, el Seminario de San José ha acogido una nueva reunión del Consejo Pastoral Diocesano. El encuentro ha estado presidido por Mons. Mario Iceta Gavicagogeascoa, arzobispo de Burgos, y moderado por José Luis Lastra, vicario de Pastoral. Tras la oración, de la que en esta ocasión se han encargado los representantes del arciprestazgo de Miranda de Ebro, y que ha estado centrada en la vocación, uno de los temas centrales de la reunión, el arzobispo ha introducido los principales temas
Tras aprobar el acta por unanimidad, los participantes han valorado el Encuentro Pastoral Diocesano que se celebró en Lerma el pasado 9 de noviembre rellenando un sencillo cuestionario. El vicario general, Carlos Izquierdo Yusta, ha informado sobre todas las novedades relativas a los actos relacionados con el Jubileo Peregrinos de Esperanza y los 950 años del traslado de la sede episcopal a Burgos.
El primero de los temas de calado abordados por el Consejo Pastoral Diocesano fue el balance del Congreso Nacional de Vocaciones en el que participó un numeroso grupo de burgaleses –cerca de 35, entre la representación de la archidiócesis y los que acudieron por otros motivos–. Paula Mena Gutiérrez ha resumido el ambiente del Congreso y ha aportado su . Por su parte, Carlos Navarro Gil, delegado de Infancia y Juventud de la archidiócesis, ha resumido las ponencias y las conclusiones del Congreso. José Luis Galiana OCSO, miembro del Servicio Nacional de Vocacional de la Conferencia Episcopal Española (CEE), ha explicado en qué consiste este Servicio y cómo trabaja. Enrique Ybáñez, director del Secretariado para la Pastoral Vocacional, ha explicado qué se hace en la archidiócesis para fomentar la vocación.
El Consejo se ha dividido en siete grupos de trabajo para responder en conjunto a dos preguntas: «¿qué podemos mejorar en Burgos para dinamizar la pastoral vocacional?» y «¿qué perfil y qué tareas concretas debería tener el equipo que esté al frente del Secretariado de Pastoral Vocacional?» y, tras la pausa para el café, se han puesto en común.
El arzobispo ha recogido las aportaciones y las ha sintetizado, expresando la importancia de que se trabajen procesos y en red, que se trabaje el acompañamiento con referentes, porque «la cultura vocacional va unida al primer anuncio y al acompañamiento», y ha valorado la posibilidad de organizar un encuentro o congreso diocesano sobre vocaciones. En cuanto al equipo que debería hacerse cargo de este Secretariado, Mons. Iceta ha destacado que debería tratarse de un grupo multidisciplinar y plural en el que estén representados todos. «Con estas aportaciones creo que se puede hacer un buen trabajo», ha afirmado.
El segundo de los temas centrales del Consejo Pastoral Diocesano ha sido la educación afectivo-sexual en los niños y los adolescentes. Los delegados de Familia y Vida de la archidiócesis, Jorge Lara y Laura Pérez, y Laura Terradillos, miembro del equipo de la Delegación, han presentado el Proyecto Diocesano de Educación afectivo-sexual y la implantación del modelo TeenSTAR en la archidiócesis. El arzobispo ha señalado que es importante «que sea educación, no información».
Para concluir, el director de la Comisión para el Sostenimiento de la archidiócesis, Jaime Prado Nebreda, ha explicado al Consejo en qué consiste este organismo recién creado y cómo va a trabajar para lograr una mayor corresponsabilidad de los fieles, especialmente de los laicos. También ha presentado a los miembros de la Comisión y del Consejo Asesor.
Con esta última intervención, ha concluido esta sesión del Consejo Pastoral Diocesano, que ha sido convocado a una nueva reunión el próximo sábado, 24 de mayo.