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La archidiócesis de Burgos está experimentando un fenómeno significativo: el aumento constante de adultos que buscan recibir el sacramento de la Confirmación. Durante el curso 2023-2024, se ha registrado un notable incremento, alcanzando cerca de 90 confirmaciones de adultos, una cifra que refleja un creciente interés y compromiso de los fieles con su fe.

Este fenómeno no es aislado y forma parte de una tendencia más amplia observada en la Iglesia católica, donde cada vez más personas en edad adulta deciden completar su iniciación cristiana. La Confirmación, que junto con el Bautismo y la Eucaristía constituye uno de los tres sacramentos de la iniciación cristiana, es vista por muchos como una oportunidad para renovar y profundizar su fe, así como para asumir un compromiso más activo dentro de la comunidad eclesial.   La madurez de la fe no tiene edad y es alentador ver cómo los adultos encuentran en la Confirmación una ocasión para reforzar su relación con Dios y con la Iglesia. Un fenómeno que también es fruto del esfuerzo de la archidiócesis por ofrecer una catequesis adaptada a las necesidades y circunstancias de los adultos.

En este sentido, la Vicaría de Pastoral de la archidiócesis ha implementado programas de formación específicos para adultos, que incluyen sesiones de catequesis, retiros espirituales y acompañamiento personal. Estos programas no solo preparan a los candidatos para recibir el sacramento, sino que también los invitan a integrar más plenamente su fe en la vida cotidiana, fomentando una espiritualidad madura y comprometida, a la vez que se insertan en la vida parroquial.

 

«Mi fe va creciendo cada día»

Entre los confirmandos adultos, las motivaciones varían. Algunos buscan completar un proceso que iniciaron en su juventud pero que no pudieron culminar, mientras que otros, tras vivir experiencias significativas, sienten la necesidad de reafirmar su fe. Incluso hay casos en los que los catecúmenos han recibido los tres sacramentos de iniciación cristiana. Es el ejemplo de Lucas Criado, un joven arandino de 18 años que recibió el bautismo, la confirmación y la eucaristía el pasado 15 de mayo. «Mi fe va creciendo día a día y hoy sigo aumentando mi fe. Ha sido interesante preguntarse, descubrir, acercarse a la gente que tiene fe… », explicaba en el programa El Espejo de COPE Burgos.

El crecimiento en las confirmaciones de adultos también refleja un cambio en la percepción de la fe y la espiritualidad en la sociedad actual, donde la búsqueda de un sentido profundo y trascendental está cobrando nueva relevancia. La archidiócesis de Burgos, consciente de esta realidad, continúa trabajando para acompañar a los fieles en su camino de fe, ofreciendo espacios y oportunidades para el encuentro con Dios y con la comunidad.

Así, el aumento de las confirmaciones de adultos se presenta no solo como una estadística positiva, sino como un signo esperanzador de la vitalidad y dinamismo de la Iglesia en Burgos. Un fenómeno que, sin duda, invita a reflexionar sobre la importancia de una fe vivida y compartida en todas las etapas de la vida.